Cred. imagen: NASA

Tres fueron los galardonados en esta oportunidad y dos de ellos -Syukuro Manabe y Klaus Hasselmann- lograron esta distinción "por la modelización física del clima de la Tierra y por haber cuantificado la variabilidad y predicho de forma fiable el cambio climático", dictaminó el jurado.

El tercer Nobel en Física 2021 es el Dr. Giorgio Parisi a quien han distinguido "por el descubrimiento de la interacción del desorden y las fluctuaciones en los sistemas físicos, desde la escala atómica a la planetaria".

Consultada sobre dos de los premiados cuyos trabajos refieren a la meteorología, la Dra. en Cs. de la Atmósfera Josefina Blázquez (Prof. en la Facultad de Cs. Astronómicas y Geofísicas e Investigadora adjunta del CONICET) comentó, "el Dr. Manabe (Universidad de Princeton, Nueva Jersey) demostró en la década del ´60 que el incremento en los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera implicaba un aumento en la temperatura del aire. La demostración de esta premisa fue crucial para comenzar a comprender que el accionar humano podía afectar el clima global".

En relación al Dr. Hasselmann (Instituto Max Planck de Meteorología, Hamburgo), la Dra. Blázquez señaló, "en la década del ´70 desarrolló un modelo que relaciona que los fenómenos de tiempo de corto plazo, como por ejemplo las lluvias, las tormentas, están relacionados con variaciones de fenómenos de más largo plazo que ocurren en la criósfera, los océanos, la vegetación. Este trabajo sentó las bases para entender por qué un sistema caótico como lo es la atmósfera puede ser predecible en escalas climáticas".
"Las investigaciones que llevaron adelante Manabe y Hasselmann - agregó la Dra. Blázquez- sentaron las bases para el desarrollo de los modelos climáticos de mayor complejidad. Actualmente estos modelos climáticos se utilizan, entre otros temas, para estudiar, por ejemplo, el cambio climático.

En los últimos años se ha demostrado que la actividad humana tiene y tendrá gran injerencia en la modulación del clima, a través de la emisión de gases de efecto invernadero -entre ellos el dióxido de carbono- y es a través de estos modelos que se pueden proyectar los cambios que podrían sufrir en el futuro algunas de las variables que componen el sistema climático (lluvia, temperatura, vientos, nivel del mar, etc.), no solo a nivel global, sino también a nivel regional. En la Argentina, actualmente existen varios grupos de investigación dedicados a estudiar el cambio climático en nuestro país".