Desde el gran debate Leibnitz-Clarke, en el siglo XVII, la naturaleza del espacio-tiempo ha sido un objeto de investigación filosófico importante. La aparición de la Relatividad General volvió a pasar parte del problema al ámbito de la física. En el trabajo [77] se mostró que la ontología científica de Mario Bunge conduce naturalmente a una teoría relacional del espacio-tiempo.